15 Mayo, 2019
Unificada con las vidas de la naturaleza donde el verde de los árboles brilla brillantemente y la energía de la vida es rica y abundante, conduje desde Tokio al Monte Hiei. Un viento refrescante sopla en la montaña. Percibo desde el espacio despejado que nada está bloqueando el camino y el mundo está conectado. Un viento de libertad sopla dentro de mi vida, un viento que atraviesa libremente el mundo. Mi corazón es ligero, lleno de un espíritu para hacer cualquier cosa. Apostando mi vida, sostuve el concierto "Leyendas de Koguryo Redescubierto" en Komae, un lugar profundamente relacionado con mis antepasadas, y Mitaka, una tierra donde mis antepasadas vivieron durante generaciones. Claramente vi que ahora puedo despegar hacia el mundo. Tomo el camino de la realización de la paz mundial. Aunque he llevado a cabo muchos conciertos en todo el mundo, conciertos milagrosos que se dijo que eran sin precedentes, siento que un verdadero escenario va a empezar. Siento que todas las actividades pasadas fueron para este tiempo y el futuro. Me voy a dar cuenta del significado de nacer. Lo que se expresó en el concierto "Leyendas de Koguryo Redescubierto" se hará realidad en el futuro. Saber cómo cambiará el mundo es vida bendita. Podemos experimentar cómo el mundo cambia para que la paz sea realizada. Sintiéndome emocionada, estoy llena de energía para dirigirme hacia el futuro.
Con sólo sentir el hermoso viento de mayo, me regocijo en el interior y me lleno de gratitud por estar viva. Estoy agradecida más que nada por poder vivir para edificar la paz expresando la demanda más íntima nacida de mi vida y viviendo con un corazón hermoso. Voy a seguir allanando el camino para que el mundo sepa algo sobre la nueva forma de vivir. Muchas gracias.
El verde de la montaña,
El verde de los árboles,
Brilla maravillosamente en mayo.
Flores de azalea
Me hablan.
Las aves transmiten su alegría.
La presencia de todas las vidas está mostrando
Que todas las vidas están unificadas.
Un momento hermoso.
Una vida eterna.
Un alma eterna.
vivir.
