KEIKO KOMA net

 

31 Marzo, 2019

En el concierto del maestro Idaki Shin que se celebró cerca de la orilla del lago de Biwako, escuché la voz de Dios en el sonido del piano, como si Dios estuviera hablando con nosotras. Fue una experiencia gratificante. En la actualidad, cuando los conflictos son interminables y la gente ha perdido su humanidad y sus almas, sintiendo profundamente que el único camino para nuestra supervivencia es que las seres humanas se conviertan en humanas, he continuado realizando nuestras actividades de conciertos donde la gente aprende lo que es una ser humana y adquieren su forma de ser. Al escuchar la narración de Dios en el concierto de hoy, percibí un sendero donde se haría realidad la paz. Comenzaré viviendo llena de luz en el interior, hablando el lenguaje de la luz, y adquiriendo un modo de vida que pueda construir espacio lleno de luz. Por fin ha llegado el momento en que puedo allanar el camino para la paz ejerciendo mi talento. Siento que nací para vivir en este tiempo. Cuando me decidí a no vivir en el mundo que está llegando a su fin, sino a adquirir un modo de vida que lleva a la supervivencia a abrir el futuro de la humanidad, percibí el futuro.
Antes del concierto de hoy, vi un video corto, creado para una presentación, mostrando el concierto "leyendas de Koguryo redescubierto" celebrado en varias partes del mundo. El video fue creado para dar a una persona de un país determinado. Entendí que apostamos nuestras vidas en cada uno de los conciertos. El tiempo presente existe en la extensión de una serie de expresiones nacidas de apostar nuestras vidas. Me mudé, temblando en mi alma, con cada espectáculo. Para que el concierto "leyendas de Koguryo redescubierto" se convierta en el futuro en "leyendas del universo", mi objetivo es transformarme en una vida que trascienda la dimensión actual y expresar en mis poemas la voz de mi vida, las voces de las almas y los mensajes de Ser Grande. Percibo que vivir llevando esto abrirá el camino a la paz. Muchas gracias.