KEIKO KOMA net

 

17 Febrero, 2019

 

Desde Tokio, donde el viento de la primavera temprana soplaba, me mudé hacia el norte para venir a Morioka. Aunque todavía hace frío aquí, sintiendo señales de la primavera de una luz que vi y un viento que sentí, me encontré emocionada como una flor que comienza a florecer en mi corazón. Mientras percibo internamente las duras condiciones del mundo, he estado profundamente agradecida de vivir los días llenos de esperanza adquiriendo una forma de vida sin precedentes en la historia humana. Reconocí que si no hubiera llegado hasta aquí, no habría entendido la verdad y la respuesta a lo que es un ser humana, que el maestro Idaki Shin descubrió al riesgo de su propia vida. Debido a mi encuentro con él cuando tuve dos meses para vivir, me recibió plenamente y me aceptó; sin que yo dijera nada sobre ello, comprendió mi sufrimiento de su capacidad innata de ver los destinos de la gente y mi condición de muerta por las personas que no entienden mi naturaleza de escuchar mensajes de árboles o flores y ver un mundo invisible a ojos genéricos. Además, mientras desentrañaba la historia de Koguryo grabada dentro de mí y me liberó de ella, mi vida se salvó. Porque la tristeza y el sufrimiento de las vidas humanas se incrustan en mí por heredar un destino proveniente de la historia ancestral de Koguryo, sintiendo que una vida que repite patrones del pasado no es una verdadera vida humana, seguí buscando vivir una vida auténtica. Busqué entender la verdad. Aunque incapaz de encontrar la respuesta, no importa cuánto lo busqué, todavía estoy viva hoy porque conocí al maestro Idaki Shin cuando mi vida estaba a punto de terminar con sólo dos meses para vivir. He llegado a entender la respuesta a lo que es ser una ser humana al vivir mi vida. Y mi entendimiento profundiza día a día y año tras año. Encontrando que podemos vivir felizmente si somos liberadas de nuestros destinos para vivir nuestras vidas auténticas y ver que este modo de vida lleva a crear un mundo pacífico, deseo que todas en el mundo tengan la oportunidad de conocer al maestro Idaki Shin. Sintiendo esperanza porque vi que el mundo actual podía transformarse de una vez y que un mundo que se abría se manifestaría cuando cada una de nosotras ejerciera la capacidad natural de cambiar el mundo en la crisis actual, vivo deseando realizar la paz mundial. Sintiendo la tristeza de vivir en un mundo que está llegando a su fin, estoy expresando la verdadera demanda de mi vida cada día, deseando crear un nuevo mundo donde todas puedan vivir. Mi corazón se vuelve animado, incluso en el frío, desde el aliento de la tierra del norte que significa que todas comenzarán a moverse pronto para que el mundo cambie. Muchas gracias.