KEIKO KOMA net

 

3 mayo, 2018

Sentí con mi vida que la energía oscura que llena el hacinamiento del hotel prestigioso que visité hoy era un mundo que se estaba moviendo hacia un final, y para seguir viviendo, sentí profundamente la necesidad de adquirir un modo de vivir unificada con Ser Grande. Al final del día, en la brisa de la noche, fui por fin aliviada cuando obtuve una taza de café tostado del maestro Idaki Shin, que me hizo pensar sobre la vida. Si bien es importante tomar acciones hacia la realización de las exigencias de mi vida para crear un mundo de paz y allanar el camino hacia Oriente para convertirlo en uno, reflexioné profundamente que mudarme de manera que doliese mi vida como ser humana haría que mi vida careciese de sentido. Vivir maravillosamente es la manera de crear un camino para lograr la paz. Mi vida estaba en dolor extremo durante mi visita al hacinamiento del hotel. Es una triste realidad que viven muchas personas, perjudicando su propia vida. En la brisa de la noche agradable, he pensado en mi vida y recuperé la tranquilidad con lágrimas en mis ojos porque la vida se convierte en significativa por vivir una vida humana auténtica.
Me despertó el mensaje recibido que transmitía que vivir con un corazón hermoso traería mucha orientación y llevaría fruto. La brisa agradable anoche me enseñó que por no perder mi base de vida con un corazón hermoso pase lo que pase, debo vivir sana, sin lesiones por la energía circundante de ruido y hostilidad. El viento en mayo es suave y agradable, para que me permita recuperar lo que significa ser humana. Naturalmente, lágrimas corrieron por mis mejillas como si para lavar mi dolor. Me dedico a ser unificada con Ser Grande en todo momento. Muchas gracias.