KEIKO KOMA net

 

29th Nov. 2017

En la Conferencia en Sendai, por primera vez en algún tiempo tuve la oportunidad en la que firmé y escribí un mensaje en el libro "Poder Temporal" y lo entregué a las participantes. Creo que fue una publicación de 2004. En la víspera de la fiesta de la conmemoración de la publicación, en el hotel de Osaka, se me paso el periódico a leer, que contenía un artículo sobre el emperador Gwanggaeto el Grande, el monarca 19º de Koguryo. Fue escrito sobre un rey que luchó llevándose la vanguardia. Lo tomé como un aviso que indica las formas de vida para mí en el futuro. Me decidí y se comenzó a actuar como una pionera. Desde entonces han pasado ya 13 años. La sensación de que de ahora en adelante puedo vivir expresando mi verdadero yo, estaba tranquilamente remojada en alegría que finalmente conseguí. Después de sentir suceder limitaciones del fenómeno diario, empezando a comprender que no podemos vivir ya de la manera que actuamos naturalmente sin ser conscientes, notando su límite en el proceso de la solución, ahora me doy cuenta que es un momento de llegar sin precedentes. Y por último estoy experimentando un sentimiento de corazón profundo que expresa la verdad que ha llegado en el momento de la vida.
Y hoy que lo he acordado con el legendario general de Koguryo, mencionado en el libro de "Poder Temporal". Recuerdo la anécdota de que él y un aliado con sólo 10.000 soldados se desafiaron en batalla contra un enemigo de 2 millones de soldados y se venció exquisitamente. Él tomó como voluntad divina que tuviese que luchar con un número menor de soldados a pesar de que parece perder la batalla y entonces decide desafiar el destino. Creo que también es voluntad divina crear un mundo donde los seres humanos puedan vivir en la era de hoy y en el futuro. Si es voluntad divina, el cielo estará de nuestro lado. Ahora en esta época, podemos trabajar juntas con Ser Grande y muchas almas. Veo que ahora es el momento de trabajar para crear el futuro de la humanidad en un sentido verdadero. Gran valor nos enviaba cuando necesitábamos mensajes necesarios. Debemos agradecerles desde el fondo de nuestros corazones y actuaremos. También se enseña que las medidas son infinitas. Y cada vez que 100% de esfuerzo trae 120% de los resultados, he vivido al mantenerlo como mi esperanza. Ahora en la crisis mundial, voy a volver al punto donde hago 100% de lo que puedo hacer.
En el salón de conferencia en Sendai, las hojas brillantes en la oscuridad de la noche llevaron a una fragancia nostálgica. Sentí la fragancia del "Koma", de cuya agua traslapó el "río de Hirose", que escuché durante el tifón. Estoy muy agradecida por poder trabajar junta con las almas.