22th Dec. 2016
Desde ayer, he estado realizando la unidad de la música tocada en nuestra casa de huéspedes por maestro Idaki Shin. Así puedo olvidar un lapso de tiempo y concentrarme en mi trabajo. Mi vida se convirtió en cálida y sudorosa. Me di cuenta de una vida en el centro de la historia humana para la creación de un mundo nuevo. Al nacer como una ser humana podía realizar cómo debemos vivir de una manera ideal. Hoy me di cuenta de un ritmo para seguir adelante con alegría y vigor. Me sentí agradecida de estar viva. Estos días sentí desasosiego porque estaba eclipsada por algo que viene del pasado, mientras que maestro Idaki Shin tocaba el piano improvisado para expresar la eternidad dentro de una instancia, ahora. Esto nos permitió realizar una naturaleza humana verdadera. Esta es la mejor fruta que una puede esperar ver en nuestro mundo. Quería compartirla con todas en tierra. Muchas gracias.
