KEIKO KOMA net

 

25th Jul. 2015

Tenía una reunión de salón en el Café Akira en Tokio después de una larga ausencia. Me di cuenta de que nuestro concierto celebrado el 23 de junio de hecho había transformado nuestro mundo y estábamos viviendo en un mundo totalmente nuevo. Por lo tanto, nadie podía entender la situación de la experiencia en el pasado. Me sentía perpleja y estuve comentado libremente sobre mis impresiones. Entonces imaginaba un nuevo modelo de negocio moviéndome alrededor de Japón en coche que abriría un futuro maravilloso. Me alegré de estar provista de la oportunidad de hablar sobre esto en nuestra reunión de salón. Empezamos por la proyección de un trabajo en vídeo de la ciudad de Castillo Wandu creado por maestro Idaki Shin que me hizo sentir el universo y la alegría de vivir en un mundo sin fin. Mi mente se purificó. La música creada por el maestro Idaki Shin siempre manifiesta un espacio cósmico y ejerció una gran influencia trascendiendo el espacio. Me di cuenta de que era espacio verdaderamente humano para los seres humanos vivir fiel a la naturaleza de la vida. Una podría profundizar una comprensión de la naturaleza humana. Me llené de esperanza como me di cuenta de que podríamos nosotras mismos sintonizar este espacio universal y vivir. Me sentí agradecida en el corazón de poder realizar cosas esenciales en la naturaleza humana todos los días y me dirigiría vigorosamente para un futuro rico.