KEIKO KOMA net

 

27th Jun. 2015

Debido a algunos problemas nuestro café Kilimanjaro Gomata Suji ha sido agotado en Japón durenate estos meses y hoy uno recién importado fue entregado a mí después de la torrefacción. Después de una larga ausencia hice un café con alegría y vertí agua caliente. Sentí tanto la energía de la Gran Madre Tierra de África y las circunstancias de las sociedades humanas. Mientras siempre disfrutaba hablando con los granos de café y vertí café en una taza dibujé un plano de la mente paisajista. Supo extremadamente dinámico y a nodriza. Aprecié mucho su sabor y me sentí agradecida de poder directamente importar el café Gomata Suji muy raro y exquisito desde Tanzania y disfrutar de la energía de Kilimanjaro y la naturaleza rica.
El ex Sr. Embajador de Tanzania a Japón nos dijo que él fue introducido por el ex Sr. Embajador de Etiopía a Japón y nos pidió celebrar el concierto Idaki Shin como evento cultural oficial de la SADC reuniendo al jefe de estado. Originó del Kilimanjaro y me dijo que el poder de la naturaleza podía sanar cualquier enfermedad difícil. Realmente cuando aterricé en Tanzania por primera vez me di cuenta de la riqueza y la atmósfera nodriza de la tierra. Por lo tanto naturalmente podía creer en la energía maravillosa del café Kilimanjaro. Así que hoy disfruté de una taza de café y me sentí agradecida al enlace entre Japón y tierra africana.
Recordé que se nos condujo hacia la montaña Kilimanjaro temprano en la mañana para ver la salida del sol sobre la montaña. Había soplado un viento fresco y entonces un rayo de sol incendió el espacio. Fue una escena muy transparente y muy hermosa. Imaginaba que desde la antigüedad la gente tenía que hacer una oración ante la montaña y consoló su corazón con gotas de lágrima. El concierto de Idaki Shin se llevó a cabo en Tanzania como una antorcha de la paz sobre la montaña Kilimanjaro que era considerada el techo de África. Eso fue en el año 2,003. Mientras que las condiciones internas de nuestra vida determinaron circunstancias externas, yo confiaba en que nuestro mundo se transformaría totalmente en uno nuevo en poco tiempo. Granos de café hodiernos me dijeron lo mismo. Yo seguiría siendo quien trabajase muy duro para lograrlo. Muchas gracias.