KEIKO KOMA net

 

6th Jan. 2015

Al haber terminado todos los eventos de año nuevo celebrados en Kioto, yo miré al cielo y vi a Santa Luna Llena que parecía que todo lo hubiese compartido con nosotras y me bendijo. La saludé con gratitud y brillantes estrellas también me enseñaron algo sobre una flecha de luz divina proveniente del universo que nos enseñó que la vida humana originalmente estaba viviendo en un mundo sin fin y en el vasto universo nuestra vida fue creada por amor y debe estar conectada a todas las criaturas vivientes. Durante muchas generaciones pasadas la humanidad redujo el enlace con el universo y se limitó a un mundo artificial muy estrecho. Para nuestra tristeza, esta fue la causa de cualquier conflicto.