6th Jun. 2014
Mundo para vivir encima los seres humanos
Lloviendo a cánteros conduje a través de Tokio con dolores en mi cuerpo como yo nací con una constitución para recibir penas y miserias de los demás. Por lo tanto reconocí cómo vivían personas en una situación dolorosa. Sin embargo sabía que en el concierto de Idaki Shin podíamos experimentar que mi interior fuese conectado a un mundo sin fin, sin ninguna frontera. Allí pude sentirme verdaderamente viva mientras que en la ciudad, cuando conocía a alguien o me quedaba entre las multitudes me sentía como ser encarcelada. El mundo humano real estaba en contra de mi vida y no podría sobrevivir. Si sólo alguien se daría cuenta del estado interno de la vida propia que estuviese conectada a un mundo sin fin, una se daría cuenta de otro mundo abierto a cualquiera llena de amor y creatividad. Así una podía profundizar en el significado de la vida humana y vivir una vida verdaderamente feliz. Hoy me di cuenta de que gente sufría de una situación de callejón sin salida cualquiera. Como sabía que el concierto de Idaki Shin me permitiese recibir mensajes de nuestra vida que nos enseñasen a vivir encima fieles a la naturaleza humana, deseaba sinceramente que muchas personas participasen en su concierto y abriesen su futuro.
