KEIKO KOMA net

 

2nd May. 2014

Tiempo

Fue el 2 de mayo hace tres años que entré en Morioka para promocionar el concierto de Idaki Shin para la catástrofe grande de Tohoku al día siguiente de haber visitado un área golpeada por el desastre para servir café gratis a cada cual allí. Entre las citas busqué un restaurante para comer y conduje a través de la ciudad y de repente mi corazón fue muy conmovido y un campo hermoso de flores de cerezo y sauces junto a un río entró en mi vista. Ellos ondeaban al viento con energías nuevas de brotes nuevos y estaban brillando brillantemente. Detuve el coche y caminé a lo largo del río y la belleza de la flor de cerezo grandemente conmovió mi corazón y derramé lágrimas. El caudal del río parecía decirme que se sabía este lucizaje desde tiempos inmemoriales. Sentí que estaba viajando en el tiempo. El aroma nostálgico conmovió mi corazón y el encuentro con el lucizaje me hizo decidir establecer mi casa allí y espontáneamente en voz alta declaré esto. Al instante fui perdida, incapaz de entender lo que había sucedido. Desde que me fuera de la orilla del río y regresara a Tokio todavía sentía que algo importante comenzara en ese momento. No pude resistirme a realizar mi deseo más profundo, así que me mudé y configuré mi oficina nueva y también compré mi hogar en Morioka. Nunca había imaginado esto en mi vida, pero estaba destinada a hacerlo. Han pasado tres años y regresé a la orilla del río en la misma fecha y especulé sobre el futuro del distrito de Tohoku, Japón y la oportunidad de realizar el lucizaje con que me había topado cuando vine aquí por primera vez. Esto debería ser el comienzo de un movimiento nuevo.