KEIKO KOMA net

 

11th June 2013

Mundo nuevo dimensional

El piano instalado en la oficina de Idaki en Kyoto fue dicho ser el mejor del mundo porque tuviese noventa y ocho teclas. Mientras el Sr. Idaki Shin lo tocaba sentí que la Madre Tierra estuviese temblando y alcanzando el universo para unificar cielo con tierra. Un mundo ilimitado devine ampliamente abierto y realicé un estado auténtico de libertad mientras la vida humana estuviese viviendo en el espacio universal vasto. Recordé que el Sr. Idaki Shin dijera que un corazón humano fuese más ancho que el universo y que nuestro corazón estuviese enchufado a un mundo infinito sin fronteras ni limitaciones. Nuestra vida era un espacio en sí. No sentí gravedad alguna y realicé alegría suprema pues mi vida fue liberada de influencias negativas innatas debido a los cursos de asesoramiento de Idaki. Devine asegurada de poder vivir encima mientras hubiese sufrido de enfermedad fatal y sido retrotraída a tierra por pesadez y dolores de mi cuerpo. No pude ver ningún futuro hasta que los cursos de asesoramiento de Idaki los hubiese estregado y entonces me sentí como si estuviese volando sobre el espacio. Fue más que un sueño y mientras devine despertada a la realidad nueva imaginé una flecha de luz proveniente hacia abajo desde un mundo celestial que me enseñara que pudiese vivir encima. Sin embargo tras cada curso de asesoramiento en el camino de regreso a casa me encontré fácilmente asombrada por energías negativas circundantes y esto me hizo reconocer que el mundo actual fuese contrario a la naturaleza humana y debiese crear una sociedad verdaderamente buena para sobrevivir. Luego comencé las actividades de Idaki para todas las generaciones venideras y nuestros niños que viviesen encima en alegría. La sociedad actual ha estado comiéndose recursos preciosos de generaciones venideras. Y como una sociedad fue construida por seres humanos, fue evidente que pudiésemos transformar nuestro mundo cambiando nuestro interior. Los cursos de asesoramiento de Idaki liberaban a gente desde todos los destinos negativos heredados desde el pasado y conectaban el meollo de nuestra vida a la naturaleza y a un mundo infinito muy allá del universo. Nuestro corazón fue efectivamente infinito y nunca debería dañar ni matar a otra gente. En realidad el Sr. Idaki Shin era capaz de recibir plenamente dolores y reclamaciones de cualquier persona como cosas propias y la estregaba transformándolas en energía nueva para vivir encima. Para crear una sociedad nueva para nuestros niños, los mayores debiésemos recuperar la función esencial de la vida humana y reconocer que el meollo de nuestra vida estuviese enchufado con cualquier otra vida en la naturaleza. No hubo frontera entre una vida y otra. Este hecho fue el punto de partida. En nuestra oficina de Kyoto el Sr. Idaki Shin tocó el piano y sentí que este mundo nuevo dimensional tal como era expresado por él alcanzase a gente en los países de Medio Oriente para socorrer vidas contra situaciones bélicas. Sentí que todos los seres divinos y dioses se hubiesen juntado para crear un mundo nuevo. Y mañana celebraría mi evento conferenciante en Takakura que también fue históricamente relacionado con Koguryo, titulado ‘Cuentos anímicos’ y difundiría globalmente la verdad anímica humana. Dondequiera que estuviese seguiría expresando mi corazón sincero y abriría un futuro maravilloso para la humanidad.