17 Dec 2012
Concierto de Kyoto
Desde la niñez y probablemente desde que fui parida he sentido una reclamación grande por ser separada que me dio dolores destrozando mi corazón y sinceramente quise recuperar el estado unitario que fue aclarado por el Sr. Idaki Shin como algo profundamente arraigado en la historia de mis ancestros. Gasté el colegio infantil llorando desde tristeza que no pude comprender la razón ya que nadie pudo imaginar que una tristeza histórica que una nunca experimentase en persona fuese heredada dentro de la vida propia y deviniese visible. Mientras escuchaba el piano tocado por el Sr. Idaki Shin reconocí que esta tristeza fuese cosa impersonal y originase desde las reclamaciones de mis ancestros. Mientras realizaba la verdad y debido al Sr. Idaki Shin quien recibiera plenamente mi tristeza experimentase que los dolores cardiacos fuesen maravillosamente transformados en vigor para vivir encima y crear un mundo nuevo. Así el modo vital heredado de la historia pasada fue borrado. Luego he estado deseando pavimentar una vía para realizar unidad entre países asiáticos orientales para que una historia humana triste nunca fuese repetida otra vez. Debido al encuentro con el Sr. Idaki Shin mi deseo sincero devino uno universal y estuvo realizando realidad y fui guiada a venir a Kyoto a hacerlo mientras el Sr. Idaki Shin dijese hoy que Kyoto deviniese un eje de Japón y comenzase a rodar para cubrir el resto de los países asiáticos orientales. Esta fue una esperanza grande y estuve anticipando verdaderamente el concierto de Idaki Shin a ser celebrado en Kyoto que nutriría nuestra espiritualidad brillantemente brillante y alma. Esta fue la cosa más importante para que nosotras viviésemos encima en una era nueva. Mientras nuestras almas y espiritualidad estuviesen conectadas con cada cosa y un futuro maravilloso, sin ellas ninguna cosa sería atractiva. Mediante la manufacture y producción de cosas desde la espiritualidad y alma una podía crear alguna cosa necesaria para generaciones venideras y contribuir a la apertura de un futuro. Esto conduciría a la construcción de un país nuevo. Nunca deberíamos ser estorbadas por fenómenos externos, olvidar el miedo a perder un mundo eterno anímico y seguir el sendero de la sociedad humana en el pasado que estaba a punto de llegar a un fin. Casi estaba gritando. Con apenas dos horas para el concierto seríamos capaces de realizar un norte eterno vital e imaginar un futuro maravilloso. Sinceramente deseaba compartir el concierto de Idaki Shin a ser celebrado en Kyoto con cuanta más gente fuese posible.