KEIKO KOMA net

27 Nov 2009

Cielo de Tokio

El cielo hodierno de Tokio parecía dramático y maravilloso. Mientras seguía la traza de nubes viajeras fui muy excitada al haber imaginado un mundo nuevo desconocido mediante los dibujos del cielizaje. Su belleza sin parangón parecía contarnos cada verdad. En Fuchu, el lugar que he frecuentado desde mi época de colegiala, celebramos una junta ejecutiva para uno de nuestros conciertos. Sentí gran energía subir desde la tierra familiar que parecía animarme. Reconocí que he estado pavimentando un camino para la paz global que mi padre había deseado hacer. La conferencia del Sr. Idaki Shin siempre me ha inspirado y uno de sus temas acerca de la formación de un grupo especial ha abierto posibilidades nuevas. Efectivamente estos días he intentado comportarme de modo más veloz y silencioso en mi vida cotidiana deseando entrenarme para actuar más eficazmente. En Kyoto y Nara he sido provista de muchas oportunidades para aprender muchas cosas nuevas. A veces tuve que pedir ayuda al Sr. Idaki Shin cuando era fuertemente influida por energías negativas. En tales ocasiones el Sr. Idaki Shin estaba dispuesto a recibirlas y liberarme con el resultado de que podía devenir más fuerte que antes. El cielizaje de Tokio parecía tan dramático y bello como en Nara y Kyoto. Agradecía enormemente al Sr. Idaki Shin y a mi vida ya que vivíamos en una era gloriosa de la historia humana cuando cada cual podía manifestar su ser verdadero y crear un ambiente nuevo, alumbrado con luz divina en el meollo de la vida.