KEIKO KOMA net

6 Nov 2009

En Nara

Hoy visité el santuario más antiguo de Japón y conocí al sumo pontífice quien me habló de forma directa y disfrutó escuchando muchas historias nuevas. Él estaba deseando preservar la verdadera historia de Japón. Ahora que un mundo nuevo de verdad estaba abierto ante todos nosotros, sentí que sus historias preciosas llegarían a ser harto conocidas en el próximo futuro. Él dio la bienvenida a nuestras actividades por la paz y en nuestra presencia levantó un teléfono y llamó a senda gente presentándonos. Caritativamente nos organizó un encuentro con una de ellas en la ciudad de Nara inmediatamente después del santuario. Por coincidencia el encuentro se situaba cerca del museo de Nara donde mi exposición de mentizajes estaba programada a suceder. La persona a la que encontré quedó muy impresionada con nuestras actividades y me prometió colaborar con nosotros. Quedé feliz de ver que había mucha gente que había estado esperando encontrarnos. Quedé muy agradecida a un amigo del sumo pontífice quien nos acompañó a Nara y nos condujo todo el día. Quedé agradecida de tener un día dramático y maravilloso en Nara.