KEIKO KOMA net

 

20 Sept 2012

 Justicia

El concierto de Idaki Shin celebrado el 11 de septiembre en Ginza, Tokio, me hizo experimentar el proceso de liberar una historia humana larga mediante la unificación de nuestro mundo con el universo mediante el ruido eterno del piano que transcendiera la dimensión de la sala de conciertos. Tras el concierto cuando miré hacia arriba el cielo nocturno vi una flecha de luz que prendió nuestro mundo y fue acompañada por el sonido de siluetas tronantes de montañas haciéndome sentir la obra grande de naturaleza y Ser Grande. Reconocí que cualesquiera seres humanos naturalmente expresarían respeto grande y asombro ante alguna cosa mayor que nosotras. Desde ahora cada vida humana será alta e igualmente respetada como vida preciosa unificada con Ser Grande y la naturaleza. La música hodierna tocada por el Sr. Idaki Shin pareció habernos prometido el mensaje de Ser Grande que la humanidad recuperase su naturaleza original. Todo el mundo artificial e irracional fabricado por el hombre estaba disolviéndose en nada una tras otra y la luz de justicia dentro de nuestra vida devenía visible. Ahora que una era nueva hubiese venido, podríamos expresar amor y paz y vivir una vida brillantemente brillante mientras la fuente de la luz fuese ilimitada.