20 Agosto 2012
En el meollo
Por fin desde mañana celebraríamos cinco conciertos en tres días en Tokio. Mientras miraba hacia arriba el cielo grande imaginé un movimiento que transformaría mucho una era humana actual. Los poderes que han sacrificado numerosas vidas humanas estaban desvaneciéndose. Crear un mundo nuevo era el sendero para que viviésemos encima. Desde los cinco conciertos de mañana se abriría un mundo completamente nuevo que no pudiera imaginar jamás. Mi corazón devino muy excitado anticipando la emergencia de un mundo nuevo que permitiese a cada cual vivir una vida brillantemente brillante. La verdad vitalicia de cada persona sería manifiesta y el mundo de la oscuridad habría acabado. Ahora estábamos encaminadas hacia un momento bisagra y supe que renovaríamos nuestra vida. Para mi alegría grande, una podía hacerlo expresando los deseos sinceros cordiales propios. Bajo cualesquiera circunstancias en cualquier era una podía crear un mundo nuevo. Esta era una verdad inmutable. Desde que tuviera tres años recé por la paz global y he estado expresando esto hasta ahora. He sido provista con provisiones por Ser Grande, y muchas cosas milagrosas han pasado en mi vida. En el concierto de Idaki Shin pude refrescar totalmente mi interior y saltar dentro de una dimensión superior del mundo. Situaciones externas siempre han seguido cambios efectuados en mi interior. Debido a su concierto pude portar esperanza para realizar una paz global sobre la cual vivir. Aunque el mundo actual estuviese lleno de incidencias miserables, reconocí que influencias de Ser Grande prevaleciesen sobre todo el espacio vasto y que pudiésemos sintonizarnos con ello y crear un futuro maravilloso. Me alegré y sentí honor grande que pudiese participar en su concierto que ejercería una influencia milagrosa sobre el resto del mundo. Representaría a cada cual en tierra y tomaría una butaca.