12 Junio 2012
Koma
Para mi gran sorpresa y alegría imaginé el mismo lucizaje que hiciera por debajo de la torre de Yasaka en Kyoto cuando me sentara y cerrara mis ojos delante del tablero de caligrafía de Koma instalado en el suelo sótano del Keiko Koma Skyrocket center en Omotesando, Tokyo. Encontré almas que estaban viviendo en un mundo bello lleno de libertad. Podían volar y bailar por encima de un espacio cósmico y podían ser cualquier cosa deseada. Este fue un significado auténtico de libertad. Un mundo invisible anímico ha efectivamente estado siendo cambiando en uno nuevo, unificado con nuestro mundo, y deviniendo ampliamente abierto a nosotras. Yo sería la última persona parada para crear una sociedad verdaderamente pacífica que nunca sacrificase una vida humana preciosa. Sin embargo estos días sentí que hubiese mucha gente que colaborase conmigo para este fin y especialmente el Sr. Idaki Shin dijo claramente que él estuviese dedicando su vida completamente a cambiar drásticamente nuestro mundo. Y en realidad él siempre ha estado haciendo esto al riesgo de su vida. Desde la niñez sentí que si hubiese incluso una sola persona que seriamente crease un mundo pacífico, luego yo pudiese seguir viva. Ahora expresaría mis deseos más sinceros pavimentando un camino para una paz auténtica en todo el mundo, un paso tras otro, junta con unas numerosas que rezasen y dedicasen su vida para realizar esto.