KEIKO KOMA net

18 Agosto  2009

Memoria de verano

Este verano por alguna razón frecuentemente he recordado días de verano en mi niñez con su aroma, sonido, viento y festivales, etc. Hoy como mi acontecimiento conferenciante fue celebrado en un edificio arcaico de estilo occidental en Yokohama al que solía acudir en busca de verdad en días calurosos durante mi adolescencia, recordé que también había escalado una montaña para tomar mando bellamente sobre el mar. Y mientras descendía de la montaña en un crepúsculo rojo, sentí gran tristeza. Ahora estoy mirando un mar desde el mismo lugar, confiada en un gran futuro en mi vida ya que reconozco el sentido de la vida humana. La vista de un crepúsculo esta vez fue dramática y bella como si estuviera bendiciendo mi vida misteriosa. Como era hora de tomar medidas para bloquear los problemas del mundo cada cual manifestaría la naturaleza propia más excelente. Cuando el interior de la gente cambiase, las circunstancias externas cambiarían naturalmente. Este era el mecanismo para transformar la sociedad entera en una verdaderamente pacífica, y he decidido celebrar dentro de un mes muchos conciertos, incluyendo tres conciertos de Leyendas de Koguryo Redescubiertas, que fueron diseñadas para difundir globalmente energía de amor, especialmente porque imaginé algo grande que pasaría en septiembre.