KEIKO KOMA net

26 June 2011

 

La manera de reconstruir nuestro país fue conocido sólo por Dios.

 

Cualquier persona tomaría el desastre masivo que golpeó en Japón como incidente propio vital. Visité alrededor de ciudades en la prefectura de Iwate golpeadas por el tsunami y quedé atónita ya que el nivel de destrucción superaba mi imaginación. Como lo he visto con mis propios ojos, devine resuelta a crear un futuro maravilloso para Japón incluso al riesgo de mi vida. Mientras gente por todo el mundo estaba apoyando Japón, nosotras deberíamos expresar nuestro agradecimiento mediante la realización de un proyecto de recuperación verdaderamente bueno. Creí que cada cual debiese esmerarse de este modo. Nací con una habilidad especial de imaginar tan claramente como nuestro mundo convencional un mundo invisible de almas y espíritus, así que luengo había deseado ser provista con una respuesta en cuanto a dónde iría la gente después de la muerte que fuese directamente conectada con investigación sobre la verdad y naturaleza de la vida humana. Y fue el Sr. Idaki Shin quien me proveyó con las respuestas a todas mis preguntas. Ahora yo estaba realizando una vida nueva, descubriendo la verdad, y era tiempo de manifestar y compartir la verdad con el fin de crear un futuro maravilloso para Japón. Pronto en Kyoto yo celebraría mi acontecimiento conferenciante titulado ‘Noche para reconstruir nuestro país’ que consistía de mi charla que tuvo influencia sustancial. Agradecí el que mi voluntad firme estuviese conectada con Dios, y haría lo mejor que pudiese dondequiera que estuviese en este mundo.