KEIKO KOMA net

8 June 2011

 

En Kyoto

 

Estaba lloviendo en Kyoto y conduje a lo largo del río Kamogawa bajo sauces saludando gentilmente. Hasta ayer conduje alrededor del distrito de Tohoku donde árboles estaban brillando brillantemente llenos de energía dinámica vital. Doquier que fuese la naturaleza parecía bella. Tras el ocaso llegué al Café de la galería de Koma en Yasaka. Fui delante de la torre de Yasaka, cerré mis ojos y saludé las almas de mis ancestros. Puesto que los cursos de asesoramiento de Idaki serían celebrados en nuestra oficina de Kyoto hoy, ellas parecían saber algo de esto y reconocí que en un mundo invisible todo se estuviese moviendo junto. Imaginé una visión luminosa y escuché el mensaje de mi vida que me mostró que gente moderna que no podía comprender un mundo invisible fuese algo innatural y extraña. En realidad un cambio en nuestro interior era la causa de cambios externos en el espacio circundante para crear un ambiente donde estábamos viviendo. Luego yo siempre reconocía que cambiar nuestro interior era el atajo para cambiar nuestro mundo. Cuando quise sacar una foto de la torre y solté el obturador, de repente cada lugar fue llenado de luz como de día y pude sacar una foto de árboles maravillosamente brillantes. Sentí que hubiese fotografiado un mundo de almas. Al mismo tiempo algo en el fondo de mi corazón fue muy conmovido. Así un mundo de almas invisible existía en realidad y la gente que no podía sentir este mundo era muy extraña. En cualquier tiempo yo era animada por almas de gente que dedicara su vida a crear una sociedad buena para generaciones venideras. Unificada con ella yo era llenada de luz y esperanza que nos guiaría para construir nuestro país. Muchas gracias.