7 May. 2011
Madre
Vi una eclosión de flor de pruno que siempre me hizo portar esperanza de luz en la oscuridad. También me hizo recordar la tibieza de mi madre y su aniversario que era por coincidencia maravillosa el mismo día que la del Prof. Ghazi de Líbano quien me había mandado una felicitación de cumpleaños. Aunque mi madre haya fenecido muchos años ha, confié en que estuviera contenta y sintiese agradecimiento al ver que yo fuese soportada por mucha gente desde varias partes del mundo. Mientras tanto, yo había publicado Reika, un libro con un DVD de poemas creados en mi adolescencia. Y desde este febrero en el Café Akira, he proyectado su vídeo de DVD desde el número 1 al 6. Quedé muy impresionada ya que muchos de mis poemas parecían vaticinar el encuentro con el Sr. Idaki Shin, y además reconocí que la luz, viento, y aroma que encontrara en mi adolescencia aun viviesen en mi corazón, ahora que una era nueva humana hubiese llegado. Estos lucizajes ocultos hicieron visibles muchas cosas esenciales en mi vida, como si cada cosa se pusiese boca abajo y trasero adelante. Nada podía ser ocultado más tiempo. Esta era una esperanza grande para mi futuro y yo seguiría fiel a Ser Grande. Cada día yo reconocía cada cosa subiendo naturalmente desde el meollo de mi vida y la expresaba en palabras como una expresión dio luz a otra de manera similar que una vida se renovase en cada momento. Reconocí que podía renovar mi vida cada día. Mientras rezaba por realizar la paz global desde la niñez siempre seguiría expresando esto cada día. Habiendo recibido cartas de apoyo y animación desde mis amigos colegas extranjeros quienes considero ser los mismos miembros de familia bajo NPO KOMA reconocí que nuestro corazón y alma estuviesen conectados mutuamente.
