4 May. 2011
Círculo de Keiko Koma
Desde la niñez he rezado por la paz en el mundo y tras encontrar al Sr. Idaki Shin reconocí poder hacerlo manifestando mi propia naturaleza vital y siempre expresando el requerimiento auténtico y más profundo de mi vida. Ahora que mi deseo más profundo para la paz estaba siendo realizado, estaba excitada para celebrar el círculo de Keiko Koma con una vista global para difundir nuestras influencias positivas y un sendero nuevo de vida bajo principios de Idaki que era una llave para vivir una vida feliz contribuyendo a gente por todo el mundo. Llamo esto un sendero nuevo para reconstruir nuestro país. Mientras nuestra vida no fuese liberada de cargas del pasado no podríamos abrir nuestro futuro, pero debido a las actividades de Idaki, podríamos hacer posibles cosas imposibles y realizar un sendero nuevo de vida humana que permitiese a cada criatura viva vivir una vida brillando brillantemente como en una vida armoniosa de naturaleza. Así nuestra vida en Idaki contribuiría a gente por todo el mundo y a generaciones venideras. Eventualmente, cuando visitara el Monte Gojo, llegué a saber que el fundador de Koguryo y mi ancestro, el rey Tomei, había llamado el Monte Gojo el árbol extendido hacia el cielo que coincidiese maravillosamente con el simbolismo de Idaki como imagen central de un árbol cósmico. Dije firmemente Idaki en mi mente. Desde la antigüedad la gente reconocía la espiritualidad humana para avanzar hacia el cielo y un futuro glorioso. Yo reconocí que hubiera comenzado las actividades de Idaki heredando la espiritualidad del rey Tomei. En el mundo de las almas, la espiritualidad humana era efectivamente eterna y la fuente para que la humanidad siguiese viva. Una debería recuperar la riqueza del interior propio y comenzar a manifestar la naturaleza propia en el mundo globalmente para contar a la gente un modo de vida nuevo. Así una podría contribuir a Japón y al resto del mundo. Fui llenada con vigor que provenía del meollo de mi vida. El círculo de Keiko Koma alegremente celebrado en el jardín de Meiji fue llego de vigor en el mismo con mucha gente que sentí como miembros de mi familia. Agradecía a mi vida el poder ir a la tierra de Koguryo para abrir un mundo pacífico mientras que mi padre debiera ir allí durante la guerra pasada. Yo seguiría trabajando junta con almas de gente en el pasado y quisiera agradecer a todo por proveerme con un comienzo nuevo.
