24 Jan. 2011
Alma de Koguryo
Recordé el día en Yasaka, Kyoto, cuando creé dibujos jaspeados en el patio interior del Café de la galería de Koma, levantando una voz de alegría incluso bajo nieve pesada y en frío severo. Ahora me puse un disfraz especial de Koguryo, hecho a medida con textiles con mis dibujos jaspeados. Realicé la naturaleza universal de la vida humana y fui llenada de energía dinámica y libre para seguir viva. Mientras observaba a otra gente poniéndose disfraces similares, usando los mismos textiles con mis dibujos jaspeados, fui muy conmovida, ya que brillaba como una flor de luz. En una sala de conciertos cuando una luz me atraía en la oscuridad, siempre había alguien que se pusiera uno. Llegué a confiar en que el algún futuro mucha gente llegaría naturalmente a vestir disfraz de Koguryo con mis dibujos jaspeados. Me contentó haber reconocido que, vistas desde el futuro, nosotras estábamos creando el comienzo de muchos estandartes nuevos. Sólo con revisar la historia de la moda una podría fácilmente descubrir que la ropa humana hubiese cambiado drásticamente su forma y modo de ser llevada. Como vivíamos en un periodo transitorio grande de la historia humana, cualquier cosa podría cambiarse a sí misma completamente en otra nueva y en esta era una haría mejor en ponerse cosas que hiciesen brillar ricamente el interior propio lleno de esperanza. Cuando yo hacía jaspeados bajo nieve pesada, mezclaba colores sola para hacer algo único en el mundo que llamaba alegremente el color de Koguryo. Entonces el disfraz de Koguryo en el color de Koguryo manifestaba a Ser Grande y yo reconocía con toda mi vida que numerosas almas de gente apreciaban esto mucho. La alegría de crear dibujos jaspeados en ese día nevado no fue mía personal, sino lágrimas de alegría de numerosas almas de gente. Lo que yo hacía respondía a los deseos más profundos del mundo de almas. Fui muy impresionada con alegría extrema allende la expresión verbal. Fui llenada con vigor para lograr cualquier cosa que hiciese para abrir nuestro futuro, ya que numerosas almas estuviese unificadas con mi vida. Fui llenada de esperanza para el futuro y el concierto hodierno también me hizo realizar una cosa maravillosa que estaba allende la expresión de mi vocabulario. Sin embargo, esto seguramente me conducía a acoger la llegada de una primavera auténtica en la historia humana.
