14 Sep. 2010
El concierto de las Leyendas de Koguryo Redescubiertas, despertando almas
Amé la música acompañante de mi poema sobre el fundador de Koguryo, el rey Tomei, tocada por el Sr. Idaki Shin en nuestro concierto celebrado en Kyoto el 6 de julio. Cerrando los ojos y escuchándola, pude sentir la presencia real del rey Tomei. Además mientras anotaba mensajes recibidos escuchándola, realicé un encuentro precioso con Ser Grande. Fui conmovida en el fondo de mi corazón. No pude abstenerme de derramar lágrimas cuando llegué a narrar un poema comenzando con la frase siguiente: ‘Koguryo fue construido, él encontró colegas nuevos, y todos crecieron juntos.’ Como había recibido un mensaje del rey Tomei que se hallaba unificado con el padre en un lugar remoto, reconocí que él había encontrado al padre de la humanidad y mi corazón fue enormemente impresionado como si estuviera siendo desgarrado. En la vida real nunca había visto a su padre y se había separado de su madre y siguió caminando solito. Encontrar a gente nueva lo condujo a construir una dinastía deseando crear un mundo para que cada cual viviese en alegría. Gente afín con la que pudiese sobrellevar cualquier dificultad lo hizo seguir viviendo. Hubiera debido realizar la naturaleza maravillosa de la vida humana. Como yo vivía una vida fiel a los principios de Idaki, reconocí la misma cosa que él; cuando colaboro con mis empleados compartiendo el mismo corazón estamos efectivamente creando un mundo nuevo eterno, enormemente animados para avanzar. Así abrimos el Café de la galería de Koma en Yasaka, Kyoto, el 1º de enero de este año, anunciando que desde aquí abriríamos un mundo nuevo para que cada cual en tierra viviese una vida verdaderamente alegre. Imaginé que aquí bajo el signo de almas de Koguryo, Koma, gente por todo el mundo se reuniría. Mientras cerraba mis ojos fui colmada de alegría ya que mucha gente con alma de Koguryo nos esperaba y árboles brillaban brillantemente. Quise experimentar con mucha gente el concierto de las Leyendas de Koguryo Redescubiertas ya que despertaría el alma de la gente.
