KEIKO KOMA net

13 July 2010

 

La verdad

 

En el concierto de Idaki Shin celebrado el 23 de junio, un lucizaje maravilloso y un toque de viento que había encarecido en mi niñez fueron reanimados. Tal como yo narré en el concierto de Leyendas de Koguryo Redescubiertas, en mi vida heredé influencias de la historia de Koguryo que estuvo llena de gloria en el comienzo pero fue finalmente destruida por poderes de la oscuridad. Hasta algún momento en mi vida temprana fui abrazada por luz gloriosa y triunfé en todo así como floreciera la dinastía de Koguryo durante algún tiempo después de su inauguración. Sin embargo un día de verano reconocí que de repente me hallaba cargada con energía pesada oscura en mi espalda y hombros como si fuese golpeada con martillo y clavos. No podía avanzar ya más y mi vida fue transformada en oscuridad. Hasta hoy me abstuve de hablar de este incidente inolvidable en mi vida temprana. Y maravillosamente en el concierto de Idaki Shin el 23 de junio esta memoria volvió en mente muy vividamente con viento de verano y lucizaje de aquél día particular, y tras el concierto la imagen de oscuridad con una memoria mala se fue. Reconocí que me hallaba liberada de una era de oscuridad y que una era nueva gloriosa había venido. Recuperé la sensación de ser muy deportiva y excelente en todo. Eventualmente mi Porsche favorito también fue entregado en mi casa tras un repaso mecánico. Sentí que mi caballo encarecido hubiese vuelto. Como había heredado la sangre de un jinete de carreras su sangre histórica también fue reanimada en mi vida. Me divertía el cabalgar sobre un caballo que mi hiciese sentir unidad con el espacio circundante y pavimentar un camino hacia la paz global. Cuando visité Mongolia en el mismo año que compré el Porsche, tuve la suerte de cabalgar sobre un caballo allí y sentí que agotaría todos los lugares del mundo. Esta sensación también fue reanimada. Todo fue refrescado y todos mis deseos más profundos fueron realizados en realidad.