KEIKO KOMA net

13 Apr. 2010

 

Mensajes de la Madre Tierra

 

Deseaba grabar mensajes de la Madre Tierra que recibiría en lugares históricos del mundo mientras solía escribirlos en poemas cuando visitaba santuarios importantes, templos, etc. Aunque no podía asir su significado, el momento cuando creaba un poema, para mi gran asombro, su mensaje siempre solía resultar veraz mediante incidentes que seguían después. Desde hace algún tiempo he deseado visitar lugares históricos y caminando por ellos narrar poemas surgiendo espontáneamente en mi mente y grabarlos en tiempo real en vez de escribirlos en palabras. Ahora estaba provista de la mejor oportunidad y haría esto no sólo en Japón sino globalmente. Desde la niñez me divertí hablando con árboles, flores y recibía mensajes del alma mediante una ráfaga de brisa e imaginaba nuestro futuro en luz y aroma. El encuentro con el Sr. Idaki Shin salvó mi vida y además me permitió moverme vigorosamente por muchos lugares en Japón y ultramar para abrir una sociedad nueva basada en principios de vida para generaciones futuras y niños. Reconocí que crearía poemas recibiendo mensajes de la Madre Tierra cuando visitaba un lugar histórico. Ellos manifestaban la verdad de la historia y animaban a los seres humanos a seguir viviendo. Agradecía a mi vida mientras realizaba mi sueño de crear una sociedad humana buena haciendo lo que amaba. Junto con la música del Sr. Idaki Shin que expresaba trasfondos históricos, atmósfera e incluso aroma que nunca podía ser expresado en palabras, llegué a realizar una sensibilidad humana que me permitía reconocer la verdad de nuestro mundo mientras creaba más poemas y repetidamente experimentaba sus conciertos. Recordé que en las ruinas antiguas de Fenicia en Tiro, Líbano, recibí un mensaje que la verdad será declarada en cualquier momento cuando haya quien la entienda. Esta fue una gran esperanza para la vida de cada cual ya que una mera persona podría cambiar el mundo entero una vez reconocida la verdad. El Sr. Idaki Shin sabía las respuestas a todas las preguntas fundamentales de qué era la naturaleza auténtica de la humanidad, y nos las proveía mediante los cursos de asesoramiento de Idaki y las actividades concertantes. Ahora era tiempo para cada una de nosotras de realizar la verdad globalmente para manifestarla todas juntas. Celebrando conciertos titulados Mensajes de la Madre Tierra y expresando públicamente mis poemas era mi manera de hacer esto.