KEIKO KOMA net

26 Mar. 2010

 

Soplada por una ráfaga de brisa en Yasaka

 

Por la tarde bajo una vista magnífica de la torre de Yasaka creé bufandas de arte usando una técnica de mármol y trabajé con agua y pinturas para hacer dibujos espontáneos y dramáticos. Mis empleados fueron muy conmovidos ante cada una de ellas y alzaron la voz aplaudiendo. Mucha gente pasando por la calle miró hacia adentro en nuestra tienda, sacó fotos, y entró en el jardín atraída por ellas gualdrapeando en el aire mientras yo las colocaba sobre palos para secarlas y las nombraba ‘Viento de Koma’. Cuando una persona acertó eligiendo y seleccionó la bufanda más apta y se la puso parecía pura y transparente como un ángel celestial. Cada cual presente aplaudió con gran aprecio. Fue natural que todas las mujeres amasen una cosa bella. Así que mi bufanda conmovió a cada cual mientras sus dibujos dramáticos expresaron un gran romanticismo de la historia. Quise decir también que me divertí en grande haciéndolas. El Bijin Shiruko hodierno también fue exquisito y placentero para mi cuerpo. Nunca había comido nada similar a esto. El Sr. Idaki Shin los había manufacturado adrede. Seguramente harían bella a una persona. Los Kaiun Zenzai satisficieron a cada cual mientras le llenaba de felicidad. Agradecí y regocijé. Mediante manjares especiales estaba realizando cosas esenciales relativas a la vida humana.