15 Mar. 2010
Una feria de flores de melocotonero y agua
Hace algún tiempo que llegué a saber que en el terruño de mi ancestro la gente solía llamar el sonido de nieve derritiéndose agua de flores de melocotonero. Debieron de oír pasos de primavera en el fondo de su corazón. Mientras yo alegremente preparaba la exposición de mañana en la galería del sótano de Keiko Koma en Roppongi, el espacio de exposición devino un mundo rosado. Mientras yo instalaba en las paredes los marcos de las fotos del Monte Gojo nevado con mis dibujos de mentizajes que había tomado yo solita, mis empleados alzaron la voz y aplaudieron cada cual de ellos diciendo que capturaban un mundo invisible. En realidad no tomé una foto basada en lo que veía sino en la sensación de ajustar el centro de mi vida a objetivos fotográficos así que coloqué mi cámara delante de mi pecho y solté el cierre. Mientras caminaba en el Monte Gojo, sentí la presencia del alma del rey Tomei y de mucha gente del Koguryo antiguo. El rey Tomei estaba caminando hacia nosotros sobre un muro de fortificación cerca de la puerta oriental. Una foto que yo tomara en este momento había mostrado exitosamente la extrema alegría y las impresiones que no pudiera expresar en palabras, la resurrección de almas de Koguryo y cuán profundamente yo era conmovida mientras un viento de almas era soplado a través de mi vida. No pude resistirme a alzar mi voz de aprecio cada vez que la observaba. La galería de Keiko Koma era un mundo bello lleno del vigor de Koguryo. En el Café Akira, hice el Koma Shiruko, una sopa dulce, con la variedad de habichuelas cultivadas en el terruño de Koguryo. En China fue llamada Happou (ocho tesoros) Shiruko y la gente solía servirlo a una mujer embarazada ya que era muy nutritiva y sana, mientras yo decidí llamar mi versión Bijin (dama bella) Shiruko. Sería servida en una vasija de Komasui y deseé que mucha gente la amara. Además, para nuestra buena sorpresa, el Sr. Idaki Shin haría café especial y Zenzai de buena suerte. Estábamos anticipando recibir a cada cual mañana.
