KEIKO KOMA net

11 Mar. 2010

 

Monte Gojo

 

Para mí el monte Gojo nevado era idéntico a la vida del rey Tomei mismo. Mientras yo seguía caminando él se unió a mí y me habló sonrientemente. Nadie podía encontrar ni una sola razón para resistir si alguien era invitado a unirse a él y trabajar juntos. Tuve una duda mínima acerca de si yo tenia suficiente dignidad para hacerlo o no. Con gran placer me dedicaría completamente a construir un país bueno para que gente pudiera vivir una vida feliz y rica. La tierra original de mi ancestro era efectivamente dinámica y parecía un lugar celestial. En el monte Gojo reconocí que para que siguiesen vivos mis ancestros no había otra opción sino conectarse con el mundo más allá del cielo. Imaginé que el rey Tomei estuviera caminando hacia nosotros encima de un muro de fortificación que ha estado en pie desde hace dos mil años. Estaba preservando alientos vividos de gente antigua que me hicieron reconocer su noble espiritualidad. Me sentí como si regresara dos mil años en medio del monte Gojo nevado y reconocí con una impresión tácita profunda que vine aquí para ver al padre de Koguryo y renovar mi vida.

En el monte Gojo
Un mundo sin fin mucho más allá del espacio visible,
Koguryo fue construido como país que
Manifestara luz primordial de origen.
Todo comenzó desde aquí.
Los mismos vientos estaban soplando en mi vida,
Contándome la vida del rey Tomei,
El padre.
Tristeza irresistible residía en su corazón.
Sin embargo no había otra manera de seguir viviendo
Sino de seguir creando un futuro glorioso.