KEIKO KOMA net

26 Feb. 2010

 

Actividades diplomáticas

 

Hoy fui invitada a almorzar en su residencia por el Sr. Embajador de Líbano. Mientras mucha gente decía que era el mejor lugar para probar comida libanesa, yo siempre la disfruté y recordé muchas cosas bellas del terruño de mi corazón, Líbano. Al mismo tiempo conflictos interminables y guerras continuas en muchas partes del mundo me entristecían. Deseaba desde el fondo de mi corazón expandir rápidamente mis actividades por la paz global ya que me hallaba provista de la solución práctica y el modo de realizarla. Cuando el interior de una persona fuera llenada de energía pacífica, entonces las circunstancias alrededor devendrían pacíficas. Un diplomático y una empleada de la embajada de Estados Unidos también estaban invitados y mutuamente reconocimos que cada individuo podía llevarse muy bien con cada otro, amén de su nacionalidad, mientras que al nivel de la política y países, para la tristeza de cada humano, conflictos nunca han parado de destruir las vidas preciosas de la gente. Recordé con gran impresión que el representante de la embajada de Pakistán en Japón una vez me dijera que la gente común por todo el mundo deseaba que cada cual viviese una vida feliz y sana y nada más. La fuente de la vida humana era efectivamente una y amor. Las actividades concertantes del Sr. Idaki Shin obligaban el público a reconocer esto en el meollo de la vida propia. Esta era una gran esperanza para realizar la paz y fui motivada a organizar más oportunidades para compartir esta experiencia más rápidamente que antes con cuanta gente pudiese por todo el mundo.