KEIKO KOMA net

28 Jan 2010

 

Mientras entraba a mi estudio en el Skyrocket Center en Omotesandou, una vasija grande y magnífica fue colocada de tal modo que me hizo levantar la voz. Era una obra de arte cerámico nuevamente realizada por el Sr. Idaki Shin para Zenzai. Generó una energía especial similar a una de la era Jomon. Llegué a confiar en que mi Zenzai sería producido exitosamente usando esta vasija. Me regodeé ante su belleza y mi corazón devino plenamente animado. Luego comencé a crear mis propias obras de arte con pleno vigor y fui motivada a hacer lo que más preciaba. Dibujé un dibujo de mentizaje sobre florero de vidrio. Luz de agua y vidrio fue mezclada y relucía tan bellamente que yo misma temblé. Levanté de nuevo la voz con alegría. Por la noche fui al Café Akira tras renovar su interior con mis obras de arte para hacer acto de presencia en una reunión de salón. Devino un espacio verdaderamente creativo. Luz se topó libremente con otras luces en una dimensión profunda desconocida de nuestro mundo. Impresionada por su belleza nuevamente alcé la voz. Esto presentó un mundo nuevo lleno de esperanza para cada criatura viva. En la reunión reconocí un significado profundo de mi pieza de arte hecha de vidrio, Komasui. Porque podía imaginar un mundo invisible, articulé en palabras una energía de luz, vientos soplando desde nuestro futuro y su aroma. Cada palabra abría una puerta y hacía un poema que parecía conectarnos con un futuro glorioso. Cuando hube creado en Kyoto un poema acerca de una princesa giré la cabeza mientras oía una voz dirigida a mí desde detrás. No había nadie. Sin embargo imaginé un paisaje lindo de eternidad que recientemente expresara en mi obra, Komasui. Agradecí el hecho de poder compartir mi visión con mucha gente mediante mis obras de arte.