KEIKO KOMA net


15 Abl 2009

Flor de Cerezo

Hoy fui invitada a un programa de charla en directo en FM Nishi en Tokio. Por coincidencia conduje por calles arqueadas de flor de cerezo por las cuales soliera caminar a mi colegio. Recordé muchas cosas con profundas impresiones, alegría, nostalgia y tristeza de vida. La personalidad de radio fue muy impresionada por mi historia y quiso ir al próximo concierto de Idaki Shin. En Tokio hay numerosos puntos donde podemos apreciar flores de cerezo. Empero, prefiero personalmente flores de ciruelo, aunque las eclosiones de cerezo son consideradas las más encarecidas de las flores para japoneses.  Ante una disposición maravillosa de su relumbrón en Arashiyama en Kyoto, me sentí extranjera ya que no me impresionaba de la misma manera fanática que a los demás japoneses. Oí decir que en China los ciruelos han sido más populares y porque mis ancestros originaron en el continente pude comprender la razón de mi preferencia. Efectivamente el alma ha estado heredando la memoria de un ancestro. Luego me puse muy triste por alguna razón incógnita. Recordé el mensaje del Sr. Idaki Shin en su último concierto; el hombre moderno ha olvidado fuentes preciosas de verdadera inteligencia y amor humanos que han sido encarecidos a través de millones y millones de años y estaba ocupado haciendo cosas innecesarias o nocivas para la vida propia que tiene billones de años de historia. Luego reconocí que cualquier memoria pegada al pasado limitaría mi potencial. La expresión de mis deseos más profundos era la única orientación para abrir un futuro maravilloso en mi vida.