18 Mar 2009
Encuentro
Mi mentizaje que imaginara ayer fue completamente diferente. Fui al centro del cohete y me senté delante de la caligrafía de Koma como era mi práctica habitual para comprender lo que pasaba en el mundo del interior. Vi una marea de energía que transformaba nuestra sociedad desde la base de la tierra. Era signo de su realización en el futuro próximo, aunque en el mundo actual más veces que no podía tardar mas de la cuenta propia. El Sr. Idaki Shin vino a participar en una asamblea del salón del café Akira el otro día y dijo cómo estábamos encarando el momento crítico en la historia humana. Reconocí que teníamos que estar plenamente preparados para tomar la iniciativa. También creó varias obras caligráficas usando pinceles y papeles tradicionales que se decían haber sido traídos a Japón por la gente de Koguryo en los tiempos antiguos. Yo estaba encargada de montarlas en marcos especialmente manufacturados y los entregué al Sr. Katsuaki. De repente, realicé el corazón heroico del mensajero del antiguo Koguryo quien debió venir para entregar un secreto rollo pictórico. Ahora estas obras caligráficas seguramente alcanzarían los corazones de numerosa gente en mi exposición a celebrarse en Kyoto.
