KEIKO KOMA net


8 Jan 2009

Nueva era y nuevo si. 

Desperté por la mañana  y vi una vista magnífica y divina del Monte Fuji que parecía celebrar el comienzo de un mundo completamente nuevo. En el concierto de Idaki Shin de ayer, mi cerebro se abrió de par el par al espacio infinito mientras se abría en cielo grande al cielo. Mi conciencia fue unificada con el vasto espacio. Su música a veces giraba hacia el cielo como un dragón y nos suministraba un alud de luz sin costura que abría una nueva era de la historia humana. Demostré ante un público mi habilidad especial por primera vez en el evento conferenciante de ayer. Desde que encontré al Sr. Idaki Shin podía imaginar energías en el espacio, el destino de las personas, y hasta la luz proveniente del mundo tres etapas antes de la gran explosión. Para visualizarlos lo que tenía que hacer era cerrar los ojos y concentrarme en lo que llamaba ser total. Cuando abría los ojos no podía verlos. Porque esta habilidad era muy especial, solía simular ser una persona normal. Pero desde que se nos hizo patente el mundo tres etapas antes de la gran explosión, llegué a verlo todo sin cerrar los ojos. Ahora ya no necesito ocultar mi habilidad especial. Puedo vivir de acuerdo con mi propia naturaleza en este mundo nuevamente manifiesto.